Isak, una de las grandes promesas del fútbol sueco, estaba prácticamente fichado por el Real Madrid, pero el Borussia Dortmund se adelantó a última hora y se llevó al joven futbolista del AIK.
Meses después del traspaso, ha trascendido la denuncia de la Federación Sueca al club por el pago de comisiones a un representante a cambio de su gestión en la operación.
El AIK deberá abonar 36.000 euros por la sanción. El club ha lamentado que la FIFA no les advirtiera de la ilegalidad. "Nuestra experiencia en la venta de jugadores menores es bastante limitada y tuvimos confianza. Aprenderemos de esta experiencia", afirmaron en un comunicado.