El partido entre la Juve y el Milan, que terminó con victoria para los de Allegri, acabó con polémica por un penalti a favor de los 'bianconeri' en el minuto 96 que metió Dybala (23).
Todo los 'rossoneri' se enfadaron mucho por la decisión del árbitro, pero el más indignado era Donnarumma (18).
El portero, que es pretendido por grandes equipos de Europa y por la Juventus, mandó un mensaje al término del encuentro al besarse el escudo del Milan ante todos los aficionados.
Este gesto se ha entendido como un rechazo a la Juventus y el heredero de Buffon será el que haga olvidar a 'Gigi' en Italia, pero todo parece indicar que seguirá vistiendo la camiseta de los 'rossoneri'.