La mayor goleada en contra del Glasgow en casa contra su eterno rival empezó a gestarse desde muy pronto. Concretamente, desde el minuto 6, cuando Sinclair adelantó a los suyos en una jugada individual.
El 0-2 llegó por un gran pase de Armstrong a Griffiths, que selló un marcador bastante positivo de cara a no haber llegado aún al minuto 20. Eso sí, el marcador no se movió hasta la segunda mitad, ya que los locales apretaron para aguantar el tipo.
Y en la segunda mitad llegó la tromba. McGregor y Boyata dibujaron el 0-4 en los primeros 20 minutos que corrieron desde que el árbitro reanudó el choque. Miller maquilló el resultado con un tanto a 10 minutos del final, pero Lustig firmó el quinto cuando el partido agonizaba.
No hay mejor manera de celebrar otro nuevo título para el Celtic que esta: una goleada histórica frente a su máximo rival.