"He tenido un poco de mala suerte porque me rompí el cuádriceps después del segundo partido, por eso he estado mucho tiempo parado. Ha sido muy duro para mí. Mucho tiempo lesionado y me ha costado superarlo", empezó explicando el central del Cádiz.
Pero Rhyner se siente "con confianza tanto dentro como fuera del campo". Aunque reconoció que el error en defensa en el partido de su regreso fue "duro" de asimilar.
"Es difícil recuperarse en el partido, pensar en positivo, pero los compañeros me ayudaron mucho. Yo pensaba en positivo, seguir adelante y hacerlo mejor durante el partido. Todo el juego se me quedó el error ahí, pero ya estoy mucho mejor porque antes pensaba más en los errores", analizó.
Proviene de un fútbol distinto, es por que se ha quedado sorprendido por el ambiente que se vive en el Ramón de Carranza. "En Suiza no hay tanta alegría como aquí. Esto es una familia. Se habla, se escucha, se hacen bromas, hasta se baila. Esto es una familia en todos los aspectos. Estoy muy feliz aquí. La primera vez que jugué en Carranza fue increíble. Es el mejor campo en el que he jugado como local. Es un placer jugar en este estadio y para este equipo", concluyó.
November 28, 2019