El técnico afirmó que a estas alturas no presta mucha atención a la clasificación. "Lo dejaría un poco de lado porque ahora estamos todos muy igualados. Me centraría en el juego del equipo. Dentro del vestuario sabemos que tenemos que ser cautos, humildes, aunque también ambiciosos", dijo.
El Espanyol firmó un encuentro sólido contra el Levante, creyendo siempre en su apuesta ofensiva. "El punto de paciencia, pero sin dejar de ser vertical, es la clave. Si te pones nervioso y te precipitas, llegas menos y el rival lo nota", analizó Rubi.
El entrenador, que admitió que no había repetido demasiado un once inicial en su carrera, se centra ahora en el partido contra el Real Madrid en el Bernabéu: "Lucharemos al máximo. Seguramente con tres encuentros en una semana participará más gente. Iremos a por todas para mantener la confianza".
En líneas generales, el preparador se mostró satisfecho del rendimiento de sus pupilos. "Aún nos podemos destapar un poco más haciendo goles. Hemos trabajado la línea más alta en defensa y no hemos sufrido tanto en los rechaces. Ha sido mejor partido que en Vitoria", subrayó.