Según ha explicado en rueda de prensa telemática, "las lesiones forman parte del fútbol y es algo que está asumido".
"Sobre todo porque sabemos que es un tramo final de liga diferente, en el que hay mucho en juego, y llegamos todos en las mismas condiciones, al partir de cero tras el confinamiento", comentó.
Por eso, han afrontado con gran entusiasmo esta nueva semana de entrenamientos, en la que han podido ejercitarse todos, como grupo, lo que supone un impulso para seguir trabajando "ya que poder estar todos juntos se agradece mucho".
San Emeterio considera que toda la plantilla está "entregada" en los entrenamientos, porque "todos los jugadores van a ser importantes, al haber más cambios para prevenir lesiones" y eso hace necesario que todos estén "activos", de cara a contribuir al éxito del equipo.
Un éxito que confía empezar en el campo del Leganés, en un partido que "será muy parecido al que sería antes del estado de alarma, puesto que son los mismos entrenadores y los mismos jugadores, aunque eso sí, con un componente de incertidumbre, puesto que ninguno sabe en qué condiciones llega el otro".
Ya lo han empezado a preparar con intensidad, y será su centro de atención durante los próximos días "porque el objetivo es salir a por todas, sin dejar nada para el siguiente partido", aunque en este caso el próximo contendiente sea un rival directo por la permanencia como es el Celta de Vigo.
Para el jugador cántabro, "nunca es positivo jugar sin afición, y menos en casa, donde son un plus para el equipo, porque aunque a veces puedan ser críticos, siempre han mostrado su apoyo, y este nos llega e impulsa", lo cual será otra novedad a la que hacer frente en el regreso competitivo.