Varios equipos andan tras el goleador de la Sampdoria Patrik Schick, algo que quiere evitar a toda costa su club, que ya trabaja en atar al joven.
El atacante es seguido por varios clubes de gran nivel de Europa, como es el caso del Inter, por lo que la Sampdoria prertende subir su cláusula de de rescisión, que actualmente está fijada en 25 millones de euros.
Pero, según recoge 'Il Secolo XIX', el propio jugador no estaria de acuerdo con esta idea y pretende que su cláusula se quede tal y como está.