No es igual hacer una plantilla para Segunda División que para Segunda B, y esa es la situación con la que se encuentra el FC Barcelona en su filial. Tras quedarse sin ascenso ante el Sabadell, los azulgranas afrontan cambios estructurales en la plantilla del segundo equipo.
Como explica 'Marca', el ascenso era clave para la continuidad de los más destacados del filial, pero ahora se hace harto complicado ya que algunos podrían encontrarse sin hueco en el primer equipo y su nivel ya pide un escalón superior a la categoría de bronce.
Hay casos evidentes. Álex Collado, aunque no pudo estar por lesión, ha sido un referente en el centro del campo y podría buscar acomodo fuera si Setién no se lo queda para el primer equipo. Otro es el de Monchu, referente ofensivo del filial, que tendría ofertas de otros clubes profesionales y del extranjero.
Y en la portería, Iñaki Peña saldría si Neto continúa como segundo portero del Barça. Un ejemplo más que hace vislumbrar el final de una generación en el conjunto azulgrana, del que ya salieron futbolistas como Abel Ruiz o Alejandro Marqués.
Por el otro lado, eso sí, llegan juveniles recién renovados y que ya destacaron con el filial en la fase de ascenso por las carencias del primer equipo. Son los casos de Konrad de la Fuente e Ilaix Moriba.