En uno de los ataques del 'canalla', el centrocampista 'xeneize' se tiró al suelo en un disparo de Gustavo Colman. El árbitro, Fernando Rapallini, vio el gesto, pero entendió que no había intención.
Todos los jugadores de Rosario Central no dudaron en acudir al colegiado y se sorprendieron al ver que no pitó nada. Rapallini le perdonó un penalti a Boca Juniors, lo que pitó finalmente fue córner.
Pablo Perez es arquero amiguero.... pic.twitter.com/DnIzXYXAjC
— kiDu (@Tcarmona_) 28 de septiembre de 2017