A pesar de que el Real Madrid ya está en cuartos tras eliminar anoche al Nápoles, poca gente apostaría por ello cuando llegó el descanso del partido. El equipo no jugaba a absolutamente nada y completó una primera parte de las peores que se recuerdan.
El choque en San Paolo sirvió para ver a jugadores como Modric o Marcelo muy lejos de la forma que mostraban en otro momento de la temporada, para volver a ver como el Madrid con la 'bbc' arriba es un equipo sin alma y para volver a confirmar a Sergio Ramos como héroe salvador de los blancos.
Se pudo ver como Zidane siempre que tenga disponible a su tridente ofensivo no se va a plantear ninguna otra opción. Ayer lo volvió a hacer, apostó por la 'bbc', a sabiendas que los napolitanos iban a salir a morder y que otra apuesta hubiera sido mucho más beneficiosa para el Madrid.
Con todo esto el Nápoles estuvo a punto de dejar fuera a los de Zidane, pero Sergio Ramos volvió a vestirse de héroe y con dos cabezazos en siete minutos dejó vista para sentencia la eliminatoria.
Zidane debe analizar a conciencia el partido de anoche en San Paolo y buscar soluciones porque el capitán no va a aparecer siempre para salvar al equipo.