Al Barcelona le cayó en suerte en los octavos de final el Nápoles, un rival que se considera asequible por el momento vivido por los partenopeos y por el poco bagaje internacional que ha tenido en los últimos años.
Guillermo Amor, portavoz del equipo azulgrana, se apresuró a rebajar la euforia: "Todos los rivales son complicados, sabíamos que podía tocar cualquiera. Sería faltar el respeto a los clubes decir que es más fácil uno que otro, quizás a ti te gusta uno y a mí otro".
El ex jugador del Barça avisó de la calidad del Nápoles: "Es una ciudad que aprieta y es un rival complicado, que ha cambiado de míster hace poco. Ha entrado Gattuso por un entrenador de mucho peso como Ancelotti".
El portavoz azulgrana reconoció a 'Movistar+' que irán a Nápoles con la ilusión de sacar un buen resultado. "Vamos allí con la idea de sacar un buen resultado y volver a Barcelona para cerrarlo. Siempre he dicho que es preferible jugar con un campo lleno, que haga ruido. El futbolista prefiere eso a un estadio frío, aunque el ruido sea en su contra y para animar al rival".
Para concluir, Amor no pudo evitar hablar de Diego Armando Maradona, leyenda del equipo italiano. "Él es un dios allí y esperamos que Messi sea decisivo y venga jugando como siempre en su casa".