A estas alturas de la película, nadie puede negar la capacidad de trabajo y esfuerzo de Cristiano Ronaldo. El empuje en el día a día es una de las claves de su éxito, quizá la más importante. De ello habló su ex compañero Evra, en 'ITV Sport', utilizando algunas anécdotas hasta ahora desconocidas.
"Daría este consejo a cualquiera: cuando Cristiano invite a comer a su casa, solo di que no. Me dijo que fuera después de un entrenamiento, estaba cansado y en la mesa solo había ensalada, pollo blanco y agua", confesó un Evra que no daba crédito: "Comenzamos a comer y pensaba que después habría carne, pero no".
Ese mismo día, Cristiano "terminó de comer y comenzó a jugar con una pelota". El portugués pidió a Evra "que hiciéramos toques". Los hicieron y, acto seguido, Cristiano quería seguir trabajando: "Me pidió que fuéramos a la piscina a nadar, diciéndome si habíamos ido a comer o porque teníamos un partido. Es una máquina, no quiere dejar de entrenar".
En cuanto a su pasión por la victoria, Evra rescató una curiosa anécdota con una partida de ping-pong como protagonista. "Estaba jugando con Ferdinand y Rio le ganó. Nos pusimos a gritar, Cristiano estaba molesto. Después de eso mandó a su primo a comprar una mesa, entrenó dos semanas y después ganó a Ferdinand delante de todos", señaló.
Evra sentenció con un "ese es Cristiano Ronaldo", el hombre que inició el Mundial con un 'hat trick' ante España y que prosigue en su lucha por ganar más 'Balones de Oro'. "No me sorprende", apostilló Evra.
Por delante, el astro del Real Madrid tiene una Copa del Mundo ilusionante, en la que Portugal pretende continuar entre los mejores después de sumar hace dos años la Eurocopa. Además, Cristiano está pendiente de saber qué ocurrirá con su futuro, ya que todavía no señaló si seguirá en Madrid o si cambiará de aires.