Cuando la sesión acabó, Simeone se fue a la banda y tras él, sin haberle hecho ningún gesto para ello, Gabi. El centrocampista se sentó en el césped y el entrenador sobre el balón para darle una larga charla, moviendo mucho las manos, mientras el jugador escuchaba.
Veinte minutos después, la charla acabó. Lo más probable es que el 'Cholo' le estuviese dando un toque de atención por las declaraciones que hizo Gabi al recoger el Premio Gredos.
"Koke está jugando por el centro, lo esta haciendo bien pero quizá a la hora de defender somos más frágiles. Hay que volver a ser un equipo contundente atrás y trabajar todos para lo mismo", afirmó el capitán. Algo que no le ha hecho demasiada gracia al argentino.
Hay que recordar que al final de un entrenamiento que tuvo lugar durante el parón de selecciones, se dio una escena parecida, pero con un importante matiz: los dos hombres hablaban entre ellos y no parecía una regañina.
¿Será más prudente Gabi a partir de ahora...?