"Un rival que te hace estar pendiente de muchos aspectos", dijo el técnico del Hércules Lluis Planagumà en la previa del encuentro sobre la que era una de las salidas más difíciles del calendario.
Así esperaba el Municipal d' Olot la llegada del Hércules a Girona, uno de los equipos llamados favoritos para luchar por el ascenso en una de las categorías más disputados del fútbol español.
Dos victorias consecutivas reducían la presión visitante, ante un Olot colocado en una zona peligrosa en la que cualquier tropiezo podría encender la alerta de proximidad a los puestos de descenso.
Poco fútbol el que desplegaron ambos equipos en un partido que vio cómo el marcador se mantenía invariable al final de los 90 minutos. La primera parte fue para el equipo local, que con dos acercamientos en el 26' y a los 36 minutos pusieron en jaque a la defensa alicantina. En ambas ocasiones un buen Falcón desbarató las intentonas locales.
Salió mejor el equipo catalán en la primera mitad, pero fueron los aspirantes al ascenso los que mejor empezaron los segundos 45 minutos. De hecho, suya fue la mejor ocasión del encuentro.
Corría el reloj cerca del 55' cuando tuvo que esforzarse al máximo Xavi Ginard, doble ocasión consecutiva primero al golpeo de Diego y después tras disparo de Pol Roigé, pero ninguno logró mover el marcador.
Poco más de ambos conjuntos en los 30 minutos restantes en los que ninguno de los dos fue capaz de llegar con claridad al área rival. 0-0 final y el Hércules que sigue sin perder en Liga fuera del Rico Pérez.
Los de Planagumà se mantienen segundos en la tabla con 23 puntos, empatados con el Villarreal B en el liderato del Grupo III de Segunda División B. Los catalanes se emplazan en la décima posición y acumulan cuatro jornadas sin vencer. Con 13 puntos suman dos más que el filial valencianista, equipo que marca los puesto de descenso a Tercera.