Sissoko abandonó el terreno en el minuto 70, tras sufrir un fuerte golpe en la cabeza. Entró en su lugar Erik Lamela y el francés se fue directo a la enfermería.
Los servicios médicos del Tottenham entonces le trasladaron al hospital más próximo para mantenerle en observación. El propio Pochettino lo confirmó al término del encuentro.
"Sí, puede tratarse de una conmoción cerebral", respondió el entrenador de los 'spurs' cuando fue cuestionado por el estado de su centrocampista.
Moussa Sissoko pasará la noche en observación para ver cómo evoluciona. Este contratiempo pone en duda su participación del próximo encuentro de Champions ante el CSKA de Moscú.