Los aficionados del Inter lograron introducir bengalas en el campo y, al terminar el partido, no dudaron en lanzarlas. Una de ellas, cayó a los pies de Sofía.
El artefacto destrozó su pie y, prácticamente, su vida. Seis años después, 11 son las operaciones que lleva a sus espaldas. Y eso no es lo peor.
Sofía Bessayah está cansada de que la justicia no castigue a los responsables. El juicio se ha aplazado cinco veces. Cada vez que hay que pasar por el juzgado, siempre hay alguien que no se presenta.
Si no es el Barça, es la UEFA y si no la empresa de seguridad para la que trabajaba. Sofía Bessayah ha reconocido en 'El Mundo' estar desesperada.
Su único sueño ahora pasa porque se haga justicia y todos los responsables cumplan el castigo que merecen.