Desde su última etapa en Primera División el Granada ha sufrido una gran remodelación que se ha llevado a cabo desde los cimientos. Con jugadores llamados a formar un bloque y no individualidades.
El cuadro 'nazarí', con Diego Martínez a la cabeza, ha tirado del mismo núcleo de futbolistas que logró el ascenso para mantener la categoría en este primer curso.
De momento, todo marcha viendo en popa. Pero el próximo rival es el Barcelona y para un enfrentamiento así se necesitan legionarios curtidos en ese tipo de batallas.
La mayoría de la plantilla tiene relativamente poca experiencia con rivales tan grandes, aunque hay uno que sobresale por encima del resto y es Roberto Soldado.
El delantero, ex del Villarreal y Valencia, es el único que sabe lo que es marcar a los azulgranas. Fue en 2010, cuando vestía la camiseta del Getafe y lo anotó desde los once metros.