Bale es uno de los jugadores 'top' del Real Madrid y líder de su Selección. Ante Eslovaquia, el 'Expreso de Cardiff' intentó ayudar a su país a llevarse la victoria con gol, pero se quedó con la miel en los labios.
Giggs le dio total libertad de movimientos para que campase a sus anchas por el terreno de juego. Bajó a su campo como si fuera Messi para recibir y luego se pasó al ataque, con algún que otro acercamiento.
Pero el detalle más significativo del partido fue en un libre directo propio para su perfil. Bale se dispuso a golpear el balón y el esférico ni cogió portería. Se marchó directamente por línea de fondo.