El Bayern ya jugaba a placer. Superado el susto del 0-1, el penalti de Thiago que salvó en primera instancia (y por dos veces) Manuel Neuer, el partido se le había puesto muy de cara.
Tolisso y Robben remontaron antes de la media hora de partido, pero el primero se rompió antes de que terminase el primer tiempo, y entró James Rodríguez al campo.
El colombiano disputó toda la segunda parte, pero tuvo que esperar a los últimos segundos de juego para anotar su primer gol de esta temporada.
Dobló Thiago a Robben, que sorprendió a todos pasando el balón en lugar de chutar (su clásica jugada, ya saben). El mayor de los Alcántara corrió hasta línea de fondo y desde ahí se la puso a un James que entró hasta la cocina a rematar.
Y el colombiano no falló. Cabeceó llevándose por delante a Tah, haciendo el tercero para un Bayern que llevaba desde el 80' con un jugador más que su rival.
15 de septiembre de 2018