La vuelta a la competición tras la pandemia del coronavirus resultó decepcionante para el Galatasaray que entrena Fatih Terim, que con la derrota queda a seis puntos del Trabzonspor y el Istanbul Basaksehir, líderes del torneo en la vigésima séptima jornada.
El Galatasaray no se recuperó del mazazo moral que supuso la lesión de su portero. Al cuarto de hora, Muslera tuvo que ser retirado en camilla, con fractura de tibia y peroné en su pierna derecha, tras un choque con un rival en un balón dividido. Fue sustituido por Okan Kocuk.
El Rizespor, que puja por evitar caer a los puestos de descenso, se adelantó en el marcador al borde del descanso, cuando una falta dentro del área del uruguayo Marcelo Saracchi al paraguayo Braian Samudio fue sancionada como penalti. Kocuk paró el tiro lanzado por el checo Milan Skoda, que aprovechó el rechace para llevar la pelota a la red.
Sentenció el choque al inicio de la segunda parte con el gol de Tunay Torun. No se sobrepuso el Galatasaray, que salió derrotado del choque para distanciarse de la pelea por el liderato.
El Rizespor escapa de la amenaza del descenso en el que sigue el Ankaragucu, que no pasó del empate en el campo del Gaziantespor (1-1). Fue el argentino Oscar Scarione el que igualó la ventaja local establecida de penalti por Alexandru Maxim.
El Genclerbirligi también se alejó de la zona baja de la tabla tras batir al Konyaspor (2-1) con un gol a siete minutos del final de Berat Ayberk Ozdemir. El marfileño marfileño Giovanni Sio había adelantado a los locales pero el serbio Marko Jevtovic estableció la igualada tres minutos después.