Todo sigue igual en El Molinón

El Sporting superó una nueva prueba de Segunda División. El Extremadura dio la cara durante los primeros 45 minutos, pero las piernas empezaron a pesar en la segunda parte, sobre todo tras la expulsión de Djaló.

El encuentro tuvo distintas fases, aunque una tónica similar durante toda la primera mitad. Los de Rubén Baraja buscaban hacer daño con balones directos a Djurdjevic, pero el Extremadura estuvo cómodo atrás y presionando la salida de balón.

El asistente desbarató un gol del delantero serbio por fuera de juego, Diego Mariño haría lo mismo con alguna internada de Chuli. El resultado no se movería al descanso en El Molinón.

La afición asturiana empezaba a desesperarse, pero tras la reanudación, se empezó a ver a otro equipo. Sousa lo intentaba mediante jugada ensayada, pero no hubo acierto. Más tarde, Manu García evitaba con el pie el primer tanto local.

Pasada la hora de partido, Djaló cometió una torpeza para su equipo. El central cometió una falta innecesaria sobre Djurdjevic cuando tenía amarilla. A partir de ahí, el cambio fue drástico y el Extremadura se encerró aún más.

A los diez minutos, otra torpeza defensiva provocada por la insistencia de Neftali llevó a Carmona a los once metros. El extremo rojiblanco hizo el 1-0 y pone muy cuesta arriba las escasas opciones extremeñas.

Después de eso, el Sporting no quiso ponerse nervioso con el balón y lo movió hasta desesperar a los de Juan Sabas. Cuando faltaban pocos minutos para llegar al minuto 90, el recién entrado Nacho Méndez hizo el definitivo 2-0 y demostró que todo sigue igual en El Molinón.