El Rangers tuvo muy cerca la victoria ante el Hibernian, pero los locales lograron igualar el partido a falta de 15 minutos para el final. El 1-1 empañó el trabajo de los de Gerrard.
Lo curioso del partido no fue el resultado final. Y es que nada más finalizar el choque, un seguidor del Hibernian saltó al campo para convertirse en el protagonista de la tarde en Easter Road.
Vio al capitán del Rangers, James Tavernier, y se le acercó a decirle un par de cosas. Le pegó una patada al balón delante del jugador y luego se encaró con él. El '2' lo empujó y la policía se tuvo que llevar arrestado al aficionado.