Partido igualado, pero soso en términos generales. Sin apenas ocasiones de gol, éste llegó con el partido casi concluido y tras un minuto de locura que dejó a ambos equipos con un jugador menos: Kucher primero, tras ver la segunda amarilla en el '85, y Mbodji después, por roja directa.
Tuvo que ser Eduardo, recién incorporado al partido, el que rompiese las tablas con el tiempo cumplido. Aprovechó el pase de Dentinho y sentenció la eliminatoria, acabando de ese modo con cualquier tipo de esperanza que aún albergasen los belgas.
El Anderlecht llevó el peso del partido en varios compases del mismo, pero no supo materializar esa superior posesión del balón en ocasiones de gol. De hecho, se pasó los 90 minutos sin tirar a puerta. A cambio, dispuso de ocho saques de esquina, nada menos, pero tampoco pudo sacar rédito de ellos.
El Shakhtar ya espera rival para los cuartos en el sortreo que se celebrará el viernes en Nyon.