Aunque no empezó mal el equipo de Beccacece, a los argentinos le acabó pasando factura el haber obtenido la ventaja por 2-1 en la ida. El planteamiento, con el paso de los minutos, fue cada vez más defensivo, sobre todo en la segunda mitad. Un autobús, como muchos lo calificarían. De hecho, Independiente del Valle acabó con un 73% de posesión y embotellando a su rival en su propio área.
Tras 45 minutos de tanteo, Independiente del Valle salió a por todas en el segundo asalto. Los ecuatorianos sabían que necesitaban solo un gol para poder ponerse por delante en la eliminatoria.
Se encontraron con la gran noche de Campaña, que salvó varios goles claros por parte del equipo local. El portero de Independiente sostuvo a los suyos durante gran parte del encuentro. Un héroe. Más bien un casi héroe, ya que no pudo evitar la catástrofe.
Pese al gran rendimiento del guardameta, la gran jugada de Sánchez por banda izquierda en el minuto 78 acabó en el primer y único tanto del duelo. Tras marcharse de dos defensores, puso un buen pase atrás, a la altura del punto de penalti.
Allí apareció Dani Nieto, que con solo un giro de tobillo pudo meter la pelota en el fondo de la red, evitando así a Campaña y logrando el 1-0 que metía a Independiente del Valle en semifinales de la Sudamericana.
A partir de entonces, la desesperación se apoderó de los de Avellaneda. El mejor ejemplo fue Figal, que vio la segunda amarilla en los minutos finales. Ni siquiera pudo generar miedo el equipo de Beccacece con uno menos en la recta final.
Tras el término del encuentro, Independiente del Valle ya puede decir que está entre los cuatro mejores conjuntos del torneo. Se enfrentará al que salga vencedor del cruce entre Fluminense y Corinthians. La llama del sueño del equipo ecuatoriano sigue más viva que nunca.