Lejos queda ya aquel equipo que maravilló al mundo y conquistó dos tripletes y multidud de títulos. El tiempo no perdona a nadie y las plantillas se tienen que ir renovando. Y el Barça lo sabe mejor que nadie.
Por ello, el conjunto de la Ciudad Condal viene apostando desde hace un tiempo, al margen de ciertas incorporaciones puntuales por necesidades del equipo (como Arturo Vidal) , por fichajes con presente y, sobre todo, mucho futuro.
La línea de la entidad catalana es clara: debe producirse un relevo generacional para paliar el declive de los grandes nombres de los últimos años. Y parece que se está consiguiendo.
Tal y como indica 'Marca', el cuadro azulgrana ha sabido ir incorporando poco a poco a jugadores jóvenes a su primer equipo y, aún más importante, al once inicial.
Considerando a Dembélé como un teórico titular, hasta cinco integrantes del once habitual 'culé' tienen 25 años o menos: el propio galo, Lenglet, Semedo, Arthur y De Jong.
La pareja formada por el brasileño y el neerlandés parece totalmente asentada en el centro del campo, mientras que el central francés le ha comido la tostada a un Umtiti que no para de coleccionar lesiones.
Semedo, pese a algunos fallos, parece inamovible del lateral derecho y Ousmane, si está sano, es un jugador diferencial arriba. Pero la cosa no queda ahí.
Todibo y Araújo van entrando poco a poco en el primer equipo y el Barça, apostando por ellos, descarta incorporar cualquier central al equipo. Por su lado, Junior Firpo ha llegado para ser el relevo de un Jordi Alba que sigue brillando pese a sus años en la élite.
El principal problema del Barcelona radica en el reemplazo de las dos máquinas, Ter Stegen al margen, que han mantenido al equipo peleando por todo estos años: Luis Suárez y Leo Messi.
El argentino es insustituible y llegado el momento su ausencia se notará, pero la incorporación de Griezmann puede paliar a corto plazo un hueco que podría llenar más tarde un Ansu Fati que, con 16 años, es un auténtico diamante en bruto.
Por su parte, el charrúa sigue sin tener un relevo claro y el Barça trabaja a fondo en el mismo, con Donyell Malen ganando enteros de cara a la próxima campaña.
En definitiva, el cuadro catalán ha puesto sus miras más allá del horizonte. Y es que aunque el presente sea muy bonito, el futuro no se debe descuidar.