En una liga amateur de Noruega, unos cables de alta tensión estuvieron cerca de dar un buen susto a los aficionados. ¡Y todo por un balonazo!
Uno de los equipos montaba un ataque a la contra, pero la defensa rival reaccionó a tiempo. Su marcador se anticipó y despejó el balón con demasiada fuerza y este se salió de un campo sin muros ni límites. El mismo está rodeado de pasto verde... y gracias.
Porque el balonazo fue a parar a unos cables de alta tensión que comenzaron a echar chispas. Los jugadores se quedaron atónitos mientras presenciaban el corte de la corriente y el humo que provocó un simple despeje.