El aficionado, un voluntario del Barnsley llamado Stephen Croft, sufrió un infarto justo antes del partido que su equipo iba a disputar contra el Burton Albion, razón por la cual el encuentro fue suspendido.
Fue atendido a pie de campo por las asistencias, y la intervención de un helicópero medicalizado probablemente salvó la vida del veterano voluntario.
Stephen Croft fue trasladado al hospital Sheffield Northern General, donde se encuentra actualmente ingresado.