Arrancaron los de Josep Gumbau con ímpetu, a lomos de un Oriol Riera que destrozó al Brisbane con dos goles en menos de un cuarto de hora, destrozando a su rival con insultante facilidad.
Antes del descanso, Oikonomidis sentenció un encuentro donde el Wanderers no dio opción alguna a su rival para depender de sí mismo para alcanzar los puestos de 'play off' por el título.
Asimismo, el doblete de Oriol Riera le sirvió para entrar en la historia del club australiano, erigiéndose como máximo goleador del club con 17 tantos en una temporada.