El racismo está siendo noticia (lamentablemente) en muchos campos del fútbol europeo y la Eredivisie quiere ponerle freno.
Para ello, la competición neerlandesa (y la Segunda División) tendrán este fin de semana un gran gesto para luchar contra esta lacra.
Y es que los partidos de las dos primeras categorías de Holanda pararán durante un minuto en señal de protesta.
"Queremos llamar la atención sobre el abuso racista en las gradas y la discriminación en el campo en los Países Bajos. Queremos recordar a los aficionados que el fútbol es de todos, sin importar su origen cultural, religión o preferencia sexual", comunicó la Eredivisie.
21 de noviembre de 2019