Vuelven a verse las caras. El técnico blanco, inmaculado por el momento en eliminatorias de Champions desde que tomó las riendas del Madrid, preparará el partido con tal de formar un gran obstáculo para un equipo al que se le ha atragantado el blanco en los últimos años.
En él estará James, que previsiblemente será titular a causa de la lesión del centrocampista chileno Arturo Vidal, que se quedará sin su venganza particular. Pero este cambio es un 'revancha por revancha', ya que James también tiene cuentas pendientes en este choque.
Este miércoles tiene una oportunidad de oro para brillar como sólo él sabe... ante el técnico que, en base a decisiones que casi nunca le beneficiaron, acabó provocando que buscara protagonismo fuera. El Bayern le acogió y en Alemania ha vuelto a sonreír... tanto que este miércoles será una de las grandes amenazas que tratarán de evitar que el Madrid acabe llegando a su tercera final consecutiva.
En Múnich ha encontrado su sitio. Aunque sus comienzos, de la mano de Ancelotti, fueron algo irregulares, la llegada de Heynckes fue determinante para que regresara el mejor James. En seis de sus últimos seis partidos de Bundesliga ha dejado su firma, bien mediante goles o asistencias. Está en racha y su punto de mira se encuentra desde hace días sobre el que fue su escudo.
Sus 6 tantos y 12 asistencias en 34 partidos dejan claro que el James que enamoró al mundo está volviendo a dejarse ver, pero ahora se encuentra ante su mayor reto de la temporada. Zidane, de la mano su un equipo invencible en Europa -del que él mismo formó parte-, llegará a Múnich a imponer su ley y James es uno de los llamados a evitarlo.