Tres plazas en Primera esperan dueño. Como cada año, la Segunda División alcanza su tramo final con varios equipos luchando por el ansiado ascenso. En esta ocasión, además, la categoría de plata del fútbol español mantiene en la pugna a no pocos históricos de nuestro fútbol, deseosos de recuperar tiempos mejores y volver a afianzarse en Primera.
Restan once jornadas y entre primero y undécimo sólo hay diez puntos de distancia. Puede parecer el Everest, pero en Segunda cualquiera puede recuperar o perder varias posiciones en cuestión de pocos partidos. Así aparece el caso del Huesca, líder durante muchísimas jornadas y que ahora ha visto como el Rayo le ha arrebatado la primera posición.
El equipo de Vallecas es uno de los clubes con solera que aspiran a verse las caras con la élite. Tras rozar incluso el descenso a Segunda B, este año ha cambiado el paso tras un inicio plagado de dudas. Vallecas vuelve a ser un fuerte para el Rayo, uno de los equipos más en forma de la categoría.
Al igual que el Zaragoza, que gracias a los goles de Borja Iglesias ha sabido renacer de su letargo. 58 campañas en Primera, el que más de los que disputan el ascenso, alumbran a un equipo necesitado en lo institucional de un ascenso. Nadie, por supuesto, quiere cruzarse con los maños.
El Zaragoza llega lanzado desde atrás, justo lo contrario que le ocurre a un Oviedo a la baja. De hecho, los asturianos están ya fuera de las seis primeras posiciones, aunque siguen teniendo a tiro plaza de 'play off', lo mismo que le ocurre a otros históricos como Valladolid, Numancia u Osasuna.
Cádiz, Sporting o Granada son otros de los invitados a la fiesta. Buscan primera o segunda posición, pero a buen seguro que no se lamentarán demasiado si concluyen el curso entre la tercera y la sexta plaza. El ascenso está que arde y, al menos este año, Segunda parece más Primera que nunca.