Todo ocurrió en el minuto 67. El Real Madrid se encontraba por delante en el marcador y el equipo bético, alentado por su gente, apretaba buscando el empate que acabó encontrando por medio de Canales.
Eso sí, el gol estuvo anulado desde un primer momento por fuera de juego, pero, segundos después de que el juez de línea invalidara la jugada, las cámaras captaron cómo Hernández Hernández estaba comunicándose con los operarios del VAR.
El árbitro acabó dando por válido el gol después de que la jugara fuera analizada en la cabina del VAR. En la repetición parece que Carvajal, que se encontraba en la banda, rompía el fuera de juego. En las repeticiones fue bastante difícil ver si el lateral estaba o no más atrás que el bético.
Esta acción llegó el mismo día en el que el Camp Nou protestó con fuerza que una caída de Coutinho dentro del área del Eibar no fuera revisada por el árbitro. Son tiempos convulsos para el VAR.
13 de enero de 2019