José Peseiro y el capitán Fernando Aristeguieta defendieron este sábado la celebración de la Copa América en Brasil, a pesar de los problemas del combinado 'vinotinto' con un brote de coronavirus que afectó a ocho jugadores.
"Si el fútbol está siendo disputado en todo el mundo, en lugares ya con hinchas, si jugamos la Libertadores y la Sudamericana, no tendría sentido poner en duda la Copa América", declaró el técnico en rueda de prensa previa al partido inaugural de este sábado ante Brasil y que marcará el inicio del torneo en Brasilia.
No obstante, el portugués admitió los problemas para alinear el equipo que enfrentará a los dueños de casa por el Grupo B, después de que once miembros de la delegación, entre ellos ocho de sus jugadores, dieron positivo por coronavirus a su llegada a Brasil.
"Esto va a afectar mucho a nuestro equipo. Del equipo que jugará este domingo solo dos estarían si el resto no tuviese COVID-19. Pero por eso no vamos a despreciar a los jugadores que estarán, porque si están aquí es porque confiamos ellos", declaró Peseiro.
"Por más que sepamos que Brasil puede armar tres o cuatro equipos para jugar la Copa América con poca diferencia entre los jugadores y que nosotros no tenemos tantos jugadores así, vamos a jugar con dignidad y entrar con todo", añadió el técnico, que convocó de emergencia a 16 jugadores.
Sin embargo, uno de los jugadores convocados, Óscar González no pudo embarcar para Brasil porque su pasaporte estaba próximo a vencer y así Peseiro espera solo a 15 futbolistas para completar la nómina.
El capitán Aristeguieta coincidió con Peseiro y manifestó que desde que el fútbol retornó en medio de la pandemia están expuestos: "Es una realidad y pienso que si tomamos las medidas necesarias podemos jugar. Puede pasar lo que nos pasó, pero estoy de acuerdo con la disputa de los torneos".