La limpieza del fútbol se suele ver sacudida, por desgracia, en más ocasiones de las deseadas. El último caso llega desde Argentina, donde Flamengo intentó apurar sus opciones de clasificación con una treta poco ética.
Blandi contó lo sucedido al final del encuentro: "Nos íbamos enterando en el segundo tiempo de lo que pasaba en Chile. Se dieron muchos goles en el otro partido. Fue medio confuso, primero estábamos adentro, después fuera".
"Me pasó a mí en una de la últimas jugadas, me dijo el capitán de ellos (Réver) que el otro juego estaba empatado, pero yo sabía que era mentira. Si justo antes, cinco segundos, me habían avisado del banco que necesitábamos otro gol", explicó.
Así, Flamengo no sólo intentó pactar un resultado, algo deshonesto, sino que intentó engañar a los del Gasómetro para dejarles fuera afrimando que Católica y Paranaense empatan, cuando era falso. ¿Qué hubiera sucedido si Blandi y los suyos hubieran accedido?