La gloria suele estar reservada para los porteros cuando estos evitan un tanto y se convierten en decisivos en algún triunfo de su equipo. Sin embargo, hay ocasiones en las que, por puro azar, se convierten también en héroes goleadores.
Es lo que le ocurrió a Moisés Muñoz, del América, en la recordada final ante Cruz Azul de 2013. Así fue su gol.