Si el PSG quería poner al rojo vivo la Ligue 1 lo consiguió, y eso que estuvo a punto de tropezar ante el Saint-Étienne y darle algo más de oxígeno al Lille.
El Saint-Étienne se puso por delante y la alegría le duró muy poco porque Mbappé no tardó en reaccionar al golpe. El delantero francés solo tuvo que dar dos toques para enviar el balón a la red.
Mbappé hizo un control orientado con la derecha, se acomodó y con la misma pierna batió a Green.