Tras tres temporadas consecutivas en Santos, esta con Jorge Sampaoli a los mandos, Rodrygo, según 'AS', estará en la pretemporada del Real Madrid, que lo firmó varios meses atrás como apuesta de futuro.
Una etapa más que ilusionante para el joven futbolista de 18 años que tendrá la oportunidad de aterrizar en un grande de Europa. Un caso parecido al de Vinicius Junior, que llegó el curso anterior procedente de Flamengo.
Pero el vínculo de Rodrygo con Santos va más allá de ser solo su equipo. Para él, su club es su familia. Sabe que es su último año allí, pero le aterró la idea de pensar que no jugaría más con ellos tras el encuentro ante Internacional.
Disputará un torneo con Brasil en Toulon y era una incógnita saber si tendría la oportunidad de disfrutar de su último duelo con la camiseta del equipo que le ha dado tanto. Así lo reconoció el propio jugador en sus palabras a 'Fox Sports'.
"El acuerdo salió este domingo. Lo pasé mal por la noche. Estuve vomitando, con mucha inflamación en la garganta. Creo que era la ansiedad por saber si seguiría aquí o no, pero, gracias a Dios, se dio todo bien", relató, haciendo referencia al entendimiento entre Santos y la Federación Brasileña. Volverá el 12 de junio tras el pequeño torneo.
"Mi voluntad era quedarme. Fue decisión mía, junto con mi padrino y mi familia. Yo quería aprovechar más ese tiempo que tenía aquí", alargó.