"Me tengo que retirar, mi rodilla no funciona como quiero. Así no podía seguir", explicó el futbolista del Zaragoza.
Y es que la rodilla se ha convertido en un calvario para el futbolista. "Me falla muchas veces en el campo y tras un entrenamiento estoy en mi casa con dolor. Esta es la única decisión que podía tomar, acabar con el fútbol hoy", continuó.
Una decisión que ya tenía tomada. "Es algo que se va forjando en la cabeza. Cuando me despertaba por la noche tres o cuatro veces por el dolor, ya sabía que tenía algo mal en la rodilla. Así que la decisión definitiva la tomé hace dos o tres semanas", explicó.
Así pues, Wilk ha decidido terminar su carrera en el Real Zaragoza. Allí llegó allá por 2015, pero jamás pudo demostrar de lo que es capaz. Las lesiones hicieron presencia en la trayectoria profesional del jugador que, tras un tiempo luchando contra su rodilla, ha optado por colgar las botas.
El futbolista pasó anteriormente por otros clubes como el Deportivo y llegó a ser internacional con Polonia.
20 de marzo de 2018