Oblak sigue demostrando que lo de la final de Milán sólo fue un mal día. El guardameta del Atlético salvó a los de Simeone del 1-0 con un paradón soberbio ante Aduriz.
El delantero del Athletic asumió la pena máxima cometida sobre Raúl García, pero se topó con el esloveno, que le adivinó la intención y sacó una buena mano al fuerte disparo del jugador vasco.
— . (@finaIlypablotv) 20 de septiembre de 2017