Eso sí, en la historia ha habido ocasiones para que un entrenador galo ganara el encuentro ya que hubo un total de tres equipos finalistas dirigidos por un técnico del país vecino.
El primero fue Albert Batteux, del Stade de Reims, que perdió dos finales de Copa de Europa, precisamente contra el Real Madrid. Fue en los años 1956 y 1958.
Herbin fue el siguiente en intentarlo. Lo hizo en el 76 sentado en el banquillo de un Saint-Étienne, que no pudo imponerse al Bayern de Múnich. En aquella ocasión los alemanes ganaron por 1-0.
El último precedente de un francés intentando hacer historia lo firmó Didier Deschamps, que perdió por 3-0 ante el Oporto de Mourinho en 2004.
Pero como las estadísticas están para romperlas, Zidane ha dejado atrás la maldición que pesaba sobre un país entero y, gracias al tanto de Sergio Ramos y la eficiencia de los suyos en la tanda fatídica, se ha coronado como campeón de Europa.