El técnico no se fía del Atlético y no quiere que sus jugadores se confíen. "Hacer un gran partido otra vez. En el fútbol nunca se sabe, lo único que queremos hacer un gran partido para pasar. Salimos al partido con un 0-0 y tenemos que ganar, pasar la eliminatoria. Vamos a intentar ganar el partido, hacer el máximo para ganar", afirmó.
Eso sí, Zidane sabe que su equipo tiene la ventaja de que está fresco: "Físicamente estamos en un gran momento, los que juegan mucho y los que juegan algo menos. Están enchufados todos".
"Saben que ahora viene lo más difícil, pero lo más bonito. Estás ocho meses trabajando para llegar a este momento, que es el más bonito para todo madridista", añadió.
"A los jugadores les gusta jugar y por eso estamos contentos de jugar cada tres días, que es lo que quieren los jugadores. Una semana entrenando se hace muy larga para los jugadores", aseguró el entrenador.
En cuanto a si manda mensajes antes de los partidos, fue claro: "No hay muchos que tengan mi número de móvil".
Zidane tiene muy claro lo que deben hacer mañana en el Calderón. "El vestuario es muy profesional y tiene hambre. Sabemos dónde estamos, pero tenemos una pasión que nos anima. Sabemos que todos los partidos son diferentes y el de mañana es complicado. Tenemos que estar muy centrados en lo que tenemos que hacer", recordó.
"La manera de equivocarnos mañana es pensar en la ida. Tenemos que hacerlo bien y no inventar cosas raras. Estamos a un paso de la final, pero no estamos en ella", añadió.
Por último, el técnico quiso hacer hincapié sobre la importancia del partido otra vez. "Faltan las finales y mañana hay una", concluyó.