El Borussia Dortmund, actual campeón de la DFB Pokal, continuó su continuidad en la competición al imponerse con cierta comodidad al Ingolstadt, equipo que actualmente es colista de Segunda División.
En la anterior fase ya se impusieron los del Signal Iduna Park con comodidad al modesto Wehen Wiesbaden, por lo que aplicaron una línea continuista basada en la rotación de jugadores importantes, algo que parece haber surtido efecto.
Erling Haaland no jugó y en su ausencia fue Thorgan Hazard el gran protagonista del encuentro, al anotar los dos únicos goles del encuentro. Lo mejor es que el belga salió al campo en la segunda mitad para intentar romper el 0-0 inicial en el que se habían encallado sus compañeros.
Un minuto después de acceder al verde desequilibró el marcador a su favor tras definir con maestría una asistencia de Julian Brandt. Era el minuto 72 y por fin comenzaba a llegar cierta tranquilidad a un equipo que había tenido una alguna ocasión, pero se había mostrado incapaz de perforar la portería contraria.
Fue de nuevo Brandt el que, tan solo dos minutos después, encontró una vez más a Thorgan con un preciso centro al segundo palo con el que el hermano del jugador del Real Madrid terminó por sentenciar la eliminatoria.
Este doblete arregló el desaguisado de una primera parte plana y con pocas ideas, en la que las mejores ocasiones de los locales llegaron en las botas de Bellingham, pero su disparo desde fuera del área lo repelió el larguero. Los de Rose ya están en la siguiente fase.