Diego López cumplió 100 partidos oficiales como portero del Espanyol, pero no pudo celebrar el homenaje que le hicieron con una victoria. El cancerbero quiso explicar sus sensaciones nada más terminar el choque.
"No encontramos ni juego ni continuidad en casa, donde no hemos puntuado. Hemos empezado bien, pero luego nos hemos ido del partido y ellos han marcado. En la segunda parte lo hemos intentado todo. Hay que seguir", explicó el guardameta del Espanyol.
El gallego reconoció que "es algo psicológico". "El partido del Granada nos hizo mucho daño y nos provocó nervios, pero no hay que jugar con esa presión añadida. Era un partido para ganar pero primero ese penalti dudoso y luego la expulsión de Calero... a perro flaco todos son pulgas", aseveró.
"Cualquier cosa nos debilita y los rivales lo saben y nos aprietan. No hay mucho que decir. Tenemos que mejorar y exigirnos más. Queda mucho pero este camino tenemos que mejorarlo. Lo vamos a dar todo. Eso va en el ADN del equipo", sentenció Diego López.
29 de septiembre de 2019