Jonas Wind está pidiendo a gritos la titularidad desde el banquillo. El danés vivió su mejor temporada en el Wolfsburgo el año pasado, cuando adquiró un estatus que perdió al inicio de este curso. Pareció recuperarlo poco después, pero, definitivamente, ha perdido su sitio en el once inicial, una decisión que se ha empeñado en cambiar a base de aportaciones claves en los últimos partidos.
Después de haber disputado 33 choques de inicio de los 37 que jugó en la 2023-24 con el cuadro alemán, con el que logró 12 goles y 8 asistencias, el panorama es distinto. Ahora sus titularidades no llegan a la mitad de los encuentros disputados (6 de 14). La llegada de Amoura ha aumentado la competencia en la delantera y el internacional por Dinamarca ha sido el perjudicado últimamente.
Wind fue suplente la 4 primeras jornadas de la Bundesliga. Jugó 4 minutos contra el Bayern, 16' ante el Holstein Kiel y 20' frente al Eintracht de Frankfurt. Parecía que su figura iba abriéndose hueco poco a poco en los planes de Ralph Hasenhüttl, pero se quedó sin disputar minuto alguno ante el Bayer Leverkusen. Su equipo perdió 3 de esos 4 duelos y el técnico le dio la oportunidad de cambiar las cosas.
El danés fue titular y disputó todo el partido contra Stuttgart y Bochum, en las jornadas 5 y 6. Su rendimiento fue sobresaliente, con 3 tantos y una asistencia en los 5 goles que consiguió un Wolfsburgo que, además, sumó 4 de esos 6 puntos. Pero la buena racha no se mantuvo. Ya ante el Bochum, Wind había partido algo más retrasado en el campo, algo que se repitió contra el Werder Bremen, equipo que le endosó un 2-4 en casa.
78 minutos estuvo en el campo nuestro protagonista, justamente los mismos que en la visita al St. Pauli. El 0-0 de aquel partido le costó 2 puntos al equipo y, de nuevo, le empezó a costar la titularidad a Wind, que lo fue por última vez el 2 de noviembre en otro empate de los suyos (1-1 con el Augsburgo).
Lejos de resignarse, el danés ha preferido responder en el campo. El 29 de octubre, antes de perder del todo su sitio, ya empezó a hacerlo. Entró en el minuto 80 ante el Dortmund, al que eliminó de la DFB Pokal con un tanto en la prórroga, en el 117'. Tras ese logro, apenas disputó 19 minutos en el 1-3 al Heidenheim y 27' en el 1-0 al Union Berlin. Y fueron 0 los que tuvo en la goleada a RB Leipzig (1-5).
Al Wolfsburgo le estaba empezando a ir muy bien sin Wind. Para ser exactos, le sigue yendo de maravilla, ya que acumula 5 jornadas seguidas con victoria. Pero, en las dos últimas, el danés fue pieza importante a pesar de partir como suplente. El conjunto 'wölfe' venció al Hoffenheim por 3-0 con un tanto y un pase de gol del '23', que sería aún más decisivo el pasado 8 de diciembre. Al descanso, su equipo perdía por 1-2 con el Mainz 05. Con él en el campo, el choque llegó a la recta final con un 2-3 que volteó solito el danés. Marcó el empate en el 83' y el gol de la victoria en el 94', con un doblete con el que sigue pidiendo, desde el banquillo, la titularidad a voces.