Acaba el juicio a Paquetá, que podría ser sancionado de por vida por las apuestas

Esta semana terminó el juicio a Lucas Paquetá, centrocampista del West Ham, después de que la Federación Inglesa se personara contra él acusándolo de amaños. Presuntamente, el brasileño forzó cuatro tarjetas amarillas para favorecer a terceros con las apuestas. Unos hechos que, de ser probados, le podrían valer una suspensión de por vida.
La audiencia comenzó en marzo, aunque se tuvo que aplazar tres semanas después hasta mayo porque los abogados de ambas partes tenían otros compromisos. Esto ha derivado en el juicio más largo que ha afrontado la FA en toda su historia. En él se ha juzgado al brasileño de cuatro cargos por amonestación deliberada para influir en los mercados de apuestas y otros dos por no cooperar con la inverstigación.
Y es que el organismo acusa al brasileño de no proporcionar determinada información y documentos, mientras que Paquetá ha negado en todo momento las acusaciones. Además, ha recibido en todo momento el respaldo del West Ham, que no ha dudado de la honorabilidad de su futbolista.
Según 'The Guardian', en el club hay preocupación porque el veredicto se demorará entre cuatro y ocho semanas. Y aunque del lado de la defensa están tranquilos, hay cierto runrún con que Lucas Paquetá pueda ser sancionado en mitad del mercado de fichajes. Esto dejaría a los 'hammers' con poco margen de maniobra, mientras que Graham Potter desconoce aún si podrá contar o no con un futbolista importante.
Los hechos que se le imputan se remontan a la temporada 2022-23 y el inicio de la 2023-24. Entonces, Lucas Paquetá habría visto la amarilla de forma supuestamente deliberada en cuatro partidos ante Leicester City (noviembre de 2022), Aston Villa (marzo de 2023), Leeds United (mayo) y Bournemouth (agosto).
Cuando se conoció el caso, el centrocampista estaba a punto de fichar por el Manchester City por unos 80 millones de libras. Lógicamente, la operación se cayó y fue suspendido de la Selección Brasileña, aunque ha podido seguir jugando con el West Ham mientras se desarrollaban la investigación y el juicio.