La Premier League se le pone en chino al Manchester City, que necesita algo más que un milagro para no ganar un campeonato que los Wolves le han ayudado a ponerlo en bandeja de plata. Los lobos de Nuno ya ganaron en el Etihad. Esta derrota es una piedra más en un camino más que empinado.
Es una quimera pensar que un Liverpool que aún no sabe lo que es perder en el campeonato liguero puede perder su renta de 14 puntos respecto al City salvo plaga de lesiones que alcance incluso al utillero o meteorito sobre Anfield. De todo ha ocurrido en el fútbol, pero más allá de las matemáticas, el juego de uno y otro equipo y las sensaciones son absolutamente diferentes. El Liverpool vuela y el City no ha parado de tropezar.
No le van bien las cosas al City, que hasta sufre expulsiones que antes no sucedían. Ederson salió de su área, Diogo Jota cayó siendo último hombre y roja al portero brasileño. La reacción del equipo de Guardiola fue más que loable, pues llegó a ponerse 0-2. Pero no resistió ante el huracán Adama Traoré.
Hay que darle mérito a los Wolves, que remontaron e incluso pudieron hacer algunos goles más. El lío con los penaltis no descentró al equipo de Nuno. Tras la roja a Ederson, Mahrez cayó en el área y entró el VAR. Sterling se topó con Rui Patricio y Rui Patricio con el VAR: se mandó repetir por adelantarse el portero. Otra vez le detuvo el lanzamiento, pero esta vez el rechace le cayó al delantero inglés.
El balón pasó a ser propiedad del equipo de Wolverhampton, pero el City firmó minutos muy buenos para mantener su renta. Y llegó un segundo zarpazo en forma de segundo gol de Sterling tras jugada colectiva y venenoso pase de De Bruyne.
Los Wolves activaron la máquina, Adama Traoré entró en fase 'Súper Saiyan' y el City no logró aguantar. Primero recortó distancias con un disparo cruzado desde fuera del área apenas cinco minutos después del segundo tanto de Sterling. Y con más de media hora por delnte.
El Wolverhampton empezó a acumular y ocasiones y tardó en llegar el empate. Adama le robó la cartera a Mendy, demasiado confiado, y pasó en el interior del área a su socio Raúl. 2-2 en el 82'. Ya en el minuto 90 Doherty puso el Molineux Stadium bocabajo tras triturar a Otamendi y marcar de tiro por bajo.
Los Wolves se ponen quintos, a dos puntos de puestos Champions, después de estar jornada de cierre del 'Boxing Day'. El City es tercero con 38 y 52 tiene el líder Liverpool, con un partido menos.