Soplo de aire fresco para los aficionados del Sevilla. El conjunto hispalense picó piedra y sudó de lo lindo para poder celebrar tres puntos de oro contra el Cádiz. El triunfo sabe mejor al ser en los minutos finales y ante un rival directo como es el equipo de Sergio González, que empezó el duelo con un punto más que los locales.
El Sánchez-Pizjuán fue testigo del buen nivel mostrado de los suyos desde el comienzo. Ya en los primeros compases, un gran Lamela se hizo grande y conectó en varias ocasiones con Jesús Navas, que volvió a ser un puñal por la banda derecha. De hecho, un centro del español al argentino generó el primer 'uy' de la grada.
El objetivo de los visitante fue claro: robar y salir a toda velocidad al contragolpe. Y así le metieron el miedo en el cuerpo a Bono pasados los 20 minutos de juego. Ocampo corrió por la banda izquierda y conectó con el Choco Lozano, quien disparó desde su casa, pero el meta marroquí pudo sacar la mano y despejar a córner.
A la media hora, otra vez Lamela inquietó a Ledesma con un disparo con la derecha. Sin embargo, lo mejor se reservó para el tramo final de la primera parte. El ex del Tottenham y Roma controló dentro del área y le pegó con la zurda sin caer antes de que el balón diera en el palo y se introdujera en la portería cadista.
La euforia quedó en nada cuando Hernández Hernández fue avisado por el VAR para que anulara la diana. En el inicio de la jugada, Óliver Torres, que participó antes de que Navas recogiera la pelota, partió en claro fuera de juego. Monchi bajó al césped y volvió a protagonizar un enfado con los colegiados, esta vez con balonazo incluido.
En la reanudación, los de Jorge Sampaoli no bajaron el pie del acelerador y siguieron al mismo nivel. Ledesma empezó a desquiciar a los futbolistas de Nervión con sus paradas y otro que pudo comprobar de sus reflejos fue Rekik, quien lamentó que su zurdazo no acabara en el fondo de las mallas.
Ya en el 68', el Cádiz se salvó de la mejor ocasión del encuentro. Probó suerte En-Nesyri en primera instancia, pero Ledesma atajó. Luego, Óliver Torres intentó conectar sobre la línea y la zaga despejó la pelota. Por último, Rakitic chutó desde lejos y el meta cadista sacó una gran mano para mantener el 0-0.
Los cambios llegaron y el Pizjuán brindó un homenaje y una sonora bienvenida a Ocampos, que regresó a la capital andaluza tras su paso por el Ajax. Precisamente, el argentino fue partícipe de la jugada que lo cambió todo. Un centro de Suso hacia el '5' fue manoteado por Iván Alejo en el 86', algo que de lo que el atacante se quejó.
Tras salir la pelota fuera, el colegiado fue al monitor y no dudó en señalar penalti. Los nervios estuvieron a flor de piel, pero un veteranp Rakitic tiró de valentía para engañar a Ledesma y hacer el 1-0 desde los once metros. Con el pitido final, el alivio se instauró en el feudo sevillista y se pudo celebrar el salir del descenso.