El efecto mariposa está muy presente en el fútbol. Y lo que a veces es un drama puede luego dar lugar a bonitas historias. Como el fichaje de Alisson por el Liverpool. Aunque motivado por la horrible noche de Karius ante el Madrid que costó una Champions, luego el brasileño ha contribuido a varios títulos. Y, según recuerda el 'Daily Mail', tiene la secuela de fastidiar más al Chelsea.
Porque el equipo londinense tenía casi atado ya a Alisson aquel verano de 2018 tras múltiples conversaciones con el portero y la Roma. No obstante, a última hora apareció la necesidad del Liverpool, con 62,5 millones en mano, y terminó haciéndose con su actual centinela.
Al Chelsea acababa de írsele Courtois, al que había firmado el Real Madrid, y se vio con dinero contante y sonante para ir a por un buen portero. Sin el brasileño, se fijó en uno que estaba de moda en España, Kepa. Paradójicamente, terminó pagando más por él que por Alisson.
A día de hoy, Alisson es campeón de la Champions y de la Premier, mientras que Kepa vive horas bajas en Stamford Bridge, donde ya descaradamente le buscan un sustituto de garantías. El miércoles por la noche ambos se enfrentaron en Anfield. Pero la historia bien podría haber sido otra.