"Sólo puedo agradecerle, no he sentido presión por su parte para salir. Si ha aceptado ir al Liverpool es porque ha decidido marcharse, pero su comportamiento ha sido de diez", espetó el dirigente español con orgullo.
En este sentido, Monchi quiso enfatizar en su discurso y no dudó en destacar que la Roma nunca le abrió la puerta: "Si me hubiera dicho que quería quedarse, no lo habríamos traspasado ni por 200 millones de euros".
"En estos últimos cuatro meses he entendido que algo pasaba en torno a él. Cuando llegan clubes potentes económicamente, entiendes que pueden pasar estas cosas", sentenció con cierto aire de resignación.
Aunque todavía no es oficial el traspaso, el director deportivo de la Roma no escondió la situación: "No hemos cerrado nada todavía, pero es verdad que las negociaciones están avanzadas y está muy cerca del Liverpool".