Anuar Tuhami llegó hace 13 años a la cantera del Real Valladolid, y hace dos hizo las maletas para probar suerte en Grecia. Esta temporada, ante la previsible falta de oportunidades, volvió a salir. Desde Chipre mandó un mensaje al conjunto pucelano.
Anuar, entrevistado por 'AS', ha pasado revisa a su experiencia en el fútbol heleno, primero en Grecia, ahora en Chipre, y ha analizado la complicada situación del que aún es su club, un Valladolid que asegura que tiñe de blanquivioleta su sangre.
Su temporada ha estado plagada de altibajos. "La adaptación fue muy rápida. Nada más llegar empecé a jugar en Liga y en la Europa League y ganamos los dos partidos", empezó diciendo.
Pronto empeoró. "Fue un mazazo psicológico que nos hizo mucho daño. A partir de ahí todo fue a peor", dijo, refiriéndose a la eliminación de la Europa League, a la que le siguió en lo personal una lesión que le tuvo un mes fuera.
Sobre su futuro, Anuar, nacido en 1995 en Ceuta, no ocultó su deseo de ser internacional con Marruecos. "Yo trabajo cada semana para intentar llamar la atención del seleccionador", explicó.
"Es una selección que está creciendo muchísimo en los últimos años, con grandísimos jugadores que quieren estar en el próximo Mundial. Para mí sería algo súper bonito estar", añadió.
Y sobre el Valladolid, Anuar deseó que enderece el rumbo lo antes posible. "Espero que el equipo empiece a coger confianza y a crecer. En el pasado vivimos también situaciones muy difíciles, se decía también que teníamos un pie en Segunda, pero este equipo tiene la capacidad de resurgir en esos momentos complicados. Estoy seguro de que lo vamos a ver", afirmó, seguro.
Han sido dos temporadas fuera del club en el que creció, pero sigue soñando con volver y triunfar. "La sangre blanquivioleta corre por mis venas, desde que llegué a Valladolid a los 13 años. Siempre voy a amar al Real Valladolid", dijo Anuar, para finalizar.